Por Sin Reservas
Las autoridades de la Escuela Eugenio María de Hostos, de Sabana Perdida, en Santo Domingo Norte, dijeron que habían informado el problema que tiene el techo de la edificación, pero que no le hicieron caso.
Estamos ante la misma situación ocurrida en la Procuraduría, que les informaron sobre que, estaban poniendo en la calle al asesino de Anibel González Ureña, y nadie se enteró. O sea que aquí estos irresponsables a nadie les «hacen caso».
Pero sí, el «Hijo de los palotes» Antonio Peña Mirabal, que está en el Ministerio de Educación (gracias a Dios, pasan rápido los nueve meses que le quedan) anduvo calle arriba y calle abajo en política, pero a esto no pudo atender.
El caso es que la escuela con apenas dos años de construcción, el techo se ha desplomado en tres ocasiones, y el responsable del suceso como ahora fue que se enteró, mandó al Director de Edificaciones, Diego Pesqueira, a realizar el bulto correspondiente y chequear lo ocurrido.
Lo cierto es que Peña Mirabal, permitió que el desplome del techo hiriera a cinco niñas, las cuales tuvieron que ser llevadas de emergencia al hospital pediátrico Hugo de Mendoza, donde también atendieron el pasado año otro grupo del mismo centro y por las misma causa.